Aún no lo asimilo. Parece que es una historia que me han contado. No me puedo creer lo rápido que cambian las cosas. Ayer me preocupaba de chorradas. Hoy me tengo que preocupar por mi, tengo que ser egoísta conmigo, tengo que lograrlo.
Otros años ne sentía triste porque no me tocaba el gordo, ayer me tocó otro, el gordo que nadie quiere, el de la enfermedad. De las chungas, un cáncer de mamá en toda regla.
Siento que tengo que luchar, por mi vida, por sobrevivir, por criar a mi hija, por seguir paseando a mi perro, por mi marido, por todos.
Hoy es el primer día del resto de mis días.
El sitio de Lameiro 